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lunes, 11 de noviembre de 2013

¿Mi día a día? Sueños que nunca llegan a nada

El otro día me dediqué a investigar ciertos deportes. Uno de ellos era el lacrosse, que únicamente lo conozco a raíz de un anime que veía de pequeñita (Pretty Cure), en el que mi protagonista favorita practicaba ese deporte. 

Sí, los dibujos animados, los libros, cómics, etc. influyen mucho. También me he planteado ser compositora a raíz de otro anime (Uta no Prince sama. Maji love 1000%) (¿se escribe así), en el que la música se ve de una forma muy bonita y feliz (la realidad no tiene por qué ser así. Pero para imaginar, sirve, ¿no?




Bueno, pero a lo que iba era al lacrosse. Es un deporte en el que se usan palos con una cesta en un extremo, donde se lleva la pelota. En este juego también el objetivo es marcar en la portería. Me parece atractivo este deporte, pero lo que me disgusta es eso del cuerpo a cuerpo. ¿Quién me asegura a mí que nadie me pegará patadas y puñetazos en busca de la pelota? Es muy bonito y todo eso, pero... un poco lejos para mí. 

El contacto físico lo odio. Mis deportes siempre serán el voley y las carreras de vallas, (quizás el salto de altura o el de pértiga me lleguen algún día...)


También, hay algo que me taladra la mente desde hace tiempo. Quiero aprender a hacer parkour, el arte del desplazamiento. Es increíble. Es bestial, me encanta. Si no sabéis qué es, con estos vídeos os haréis una ligera idea. 

Lo malo es que en mi ciudad no hay mucha información acerca de eso, y la que encuentro es de hace años.




En este vídeo no se ve bien, pero basta para que nos hagamos una ligerita sobre qué va esto.



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